En la semana 20 de embarazo le diagnosticaron fisura labiopalatina. Lo peor que le pueden decir a unos futuros papás en una ecografía es que algo no va bien. Y nos dimos de bruces con algo que nunca hubiéramos podido imaginar, una malformación que, a pesar de ser la más frecuente, es una gran desconocida. Durante la ecografía que hice en un centro privado no me dieron demasiada información y me instaron a hablar con mi ginecóloga así que cuando salí de allí hice algo absolutamente desaconsejable, googlear. Fui la primera sorprendida cuando descubrí que la fisura labiopalatina no es solo un defecto físico, implica muchas otras cosas como el habla, la alimentación, el oído, la respiración. E incluso la asociación a otros síndromes o enfermedades. Me pasé dos días que no podía parar de llorar. Mi ginecóloga me recibió completamente desconsolada. Me intento consolar pero ella tampoco había visto ningún caso, así que tras dos o tres días llorando, mi hermana descubrió Afibal, bendito el día. Decidió llamar y habló con Rosana e incluso son su hijo :-). A las pocas horas me llamaron del hospital para citarme para una ecografía al día siguiente con las cirujanas que harían la operación. Fue completamente un antes y un después. Entré llorando desconsolada y salí con toda la información y tranquilidad de que estaba en las mejores manos. El contacto con las otras familias de fisurados del chat de Afibal también fue mi otra salvación. Ver a otras mamas y sus peques que pasaron por lo mismo y que estaban bien… fue un verdadero chute de energía.

Volví a ver la luz y me ayudó mucho a seguir con la recta final del embarazo. Lo más duro quizás es vivir esos meses con la incertidumbre de saber el alcance de la malformación. Pero al fin llego el día mas feliz de mi vida, el 19/9/19. No solo conocí al amor de mi vida, sino que me enamoré de su sonrisa y también descubrimos que solo tenia afectado el labio. Las pruebas que realizaron esos primeros días descartaron otras enfermedades, ya pudimos respirar tranquilos. Solo me queda dar las gracias a otras mamis de niños fisurados que comparten su historia y a Afibal por toda su labor creando esta red de guerreros y dándonos la mano y acompañándonos durante todo el proceso. Su labor es muy importante porque hay que dar más visibilidad a esta y a muchas otras enfermedades y malformaciones. Ojalá se le diera visibilidad a lo diferente. Ojalá dejemos de mostrar solo.